
Precisamente el Real Madrid fue el siguiente destino de Zidane a partir de julio de 2001, cuando el equipo español le contrató tras acordar con la escuadra de Turín el que constituyó el traspaso más caro de la historia del fútbol hasta ese momento. Durante su primera temporada (2001-2002) como miembro de la plantilla madridista (que entrenaba Vicente del Bosque y de la que también formaban parte futbolistas de la talla de Fernando Hierro, Roberto Carlos, Figo, Raúl o Fernando Morientes), consiguió incrementar su brillante palmarés con la Supercopa de España (2001) y, por fin, la Copa de Europa (2002). El club blanco conquistó este último trofeo tras derrotar (2-1) en la final (disputada en el estadio de Hampden Park de Glasgow) al Bayer Leverkusen, gracias, precisamente, a un extraordinario gol marcado por él en una espectacular volea. Zidane fue designado por la UEFA mejor jugador de aquella edición 2001-2002 de la Liga de Campeones. En las siguientes campañas ganó con su equipo la Supercopa de Europa y la Copa Intercontinental en 2002, y la Liga y la Supercopa de España en 2003.
En 1997 recibió el Balón de Bronce (Ronaldo y Pedja Mijatovic obtuvieron, respectivamente, los de Oro y Plata) que le acreditaba como tercer mejor jugador de entre todos los que actuaban en competiciones europeas. Un año después recibió el de Oro y fue elegido mejor jugador del mundo por la FIFA. Posteriormente le serían concedidos dos nuevos galardones como mejor jugador del año por la FIFA (2000 y 2003), así como el Balón de Plata por parte de France Football (2000).
Tras haber jugado en la sub-21, Zidane debutó con la selección nacional absoluta de Francia en 1994. Cuatro años más tarde consiguió con ella el mayor éxito de su trayectoria deportiva, al alzarse con el triunfo en la Copa del Mundo de la que Francia había sido anfitriona. El partido final, disputado en el Stade de France de Saint-Denis, enfrentó a los combinados nacionales brasileño y francés. Este último venció por tres goles a cero, los dos primeros marcados por el propio Zidane en sendos remates de cabeza. En 2000 volvió a ser la gran figura del conjunto francés que, manteniendo el bloque con el que dos años atrás conquistara el Mundial, se alzó con la victoria en el Campeonato de Europa de Selecciones Nacionales (Eurocopa) celebrado en Bélgica y los Países Bajos.
En 2002, Francia, vertebrada en torno a su juego, se presentó como máxima favorita en el Mundial que albergaron, de forma conjunta, Japón y Corea del Sur. Pero en uno de los partidos de preparación previos al inicio de la competición, Zidane sufrió una lesión muscular que le impidió estar presente en los dos primeros encuentros del torneo; reapareció en el tercero, pero no pudo evitar la eliminación francesa. De igual forma, la selección gala tampoco pudo revalidar su título continental en la Eurocopa desarrollada en Portugal en 2004; Francia cayó ante Grecia en los cuartos de final del campeonato, en el que Zidane anotó tres goles. Poco después de finalizar este evento, decidió poner fin a su trayectoria con su combinado nacional, con el que había participado en 93 partidos y marcado 26 tantos. Posteriormente, revocó esta decisión y así, el 17 de agosto de 2005, reapareció con Les Bleus en un partido ante Costa de Marfil (victoria francesa por 3-0, con un gol suyo). Su última competición como futbolista fue el Mundial desarrollado en 2006 en Alemania. En este torneo, en el que Zidane marcó tres goles y fue galardonado con el Balón de Oro que le acreditaba como el mejor jugador del certamen, su selección alcanzó la final, aunque tuvo que conformarse con el subcampeonato al perder, en la tanda de penaltis, ante Italia.
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